Quédate Quieto y Espera en el Señor
Tiempos apresurados, búsquedas desenfrenadas, deseos inagotables… ciertamente vivimos en un mundo muy demandante donde nuestras ambiciones juegan un rol determinante. Es por causa de esas ambiciones o pasiones desenfrenadas que constantemente buscamos alcanzar metas y cumplir planes sin importar las consecuencias. En medio de todo esto, no nos detenemos a meditar y esperar en el Señor y es por esto que tristemente pasamos por alto Sus planes y propósitos.
Mi Refugio es el Señor
En multitud de ocasiones podemos sentirnos solos, abandonados, sin fuerzas, abatidos y sin esperanza. Pero, los que estamos en Cristo, quienes hemos nacido de nuevo, tenemos ciertas promesas que son seguras en El… “estaré con ustedes TODOS los días hasta el fin del mundo.” Estas promesas nos dan la certeza de que Dios es nuestro refugio y nunca nos abandonara.
En Medio del Caos, Perfección
En esta vida todos enfrentaremos dolor, desgracias, angustia y muerte. Desastres naturales, enfermedades y la partida de un ser amado son motivos para pensar que todo esta en un caos y no existe solución. Pero a los ojos de nuestro Dios, solo existe perfección… y ese es precisamente Su plan, uno Perfecto aun en medio de la destrucción. Así pues, nuestra atención debe estar siempre centrada en nuestro Señor aun en medio de nuestras dudas y desesperación. Confía en El… Espera en El.